En medio del escándalo por los vínculos del diputado nacional libertario (en licencia, pero cobrando su sueldo) José Luis Espert, con el narco «Fred» Machado, a la espera de ser extraditado a EEUU, y a pesar de que el presidente Javier Milei anunció que endurecerá la política contra el crimen organizado, el ajuste también impactará en el presupuesto 2026 destinado a este rubro. En total, los programas y actividades vinculadas a la prevención, investigación y operativos contra los delitos complejos y el narcotráfico caerán en $ 18.000 millones. En el programa de control de fronteras también habrá reducciones: $ 3.087 millones menos que en 2025. el programa de Seguridad en Fronteras también bajará su presupuesto: de los $ 417.252 millones vigentes este año a los $ 414.165 millones para el próximo. El control de las fronteras estará orientado entre otras cosas, explica el documento, a “impulsar la seguridad integral contra el narcotráfico, el crimen organizado, la trata y los delitos complejos mediante un despliegue especializado”.
“Narcos y chorros: les aviso que se las vamos a hacer pasar mal”, advirtió el Presidente en un discurso que brindó por la inauguración de una fábrica en Mar del Plata esta semana. Pero lo hará con menos presupuesto: el ajuste llegó para la lucha contra el narcotráfico, que para el año 2026, entre los tres programas o actividades que dependen del Ministerio de Seguridad orientadas a la prevención y la investigación, perderán $ 18 mil millones. El dato surge de la comparación entre el proyecto presentado por el Ejecutivo al Congreso y el presupuesto abierto vigente.
Números
71%. Es lo ejecutado este año para la lucha, prevención e investigación contra el narcotráfico y el crimen organizado.
$24.000 M. Redujo del presupuesto de “Servicio de Investigación de Delitos Complejos y Operaciones Antidrogas” contra el año anterior.
A través del programa “Servicio de Investigación de Delitos Complejos y Operaciones Antidrogas”, la cartera que dirige Patricia Bullrich lleva adelante investigaciones criminales y operativos de prevención de delitos complejos y crimen organizado. “Se ejecuta una amplia gama de acciones, entre las que se destacan: prevención y represión de delitos complejos y crimen organizado, desarticulando y neutralizando organizaciones delictivas dedicadas al narcotráfico y venta ilícita de estupefacientes en todas sus formas; el control del tránsito de productos químicos esenciales para su producción; tráfico de armas; ciberdelitos; delitos contra la integridad de las personas; terrorismo; falsificación de marcas; evasión fiscal y delitos contra el orden económico, enfocando la desmantelación económica, patrimonial y financiera de los integrantes de las bandas delictivas a través de investigaciones de lavado de activos”, detalla el proyecto del Ejecutivo. Asimismo, y a través de la Dirección de Criminalística y Estudios Forenses, “asesora y asiste en todas las actividades referidas a la investigación criminal-forense, para satisfacer las exigencias científicas de las tareas policiales, judiciales e investigativas”. Este programa pasará de un presupuesto vigente en 2025 de $ 103.551,37 millones a $ 79.494 millones en 2026: $ 24 mil millones menos que en el año anterior, lo que representa una disminución del 23,3%.
El programa “Políticas de Lucha contra el Narcotráfico y la Criminalidad Organizada” tiene el propósito de iniciar y dar seguimiento a investigaciones contra el narcotráfico y sus delitos conexos. “También se ocupa de elaborar, ejecutar y evaluar planes y programas de acción contra el tráfico ilícito de precursores químicos a efectos de prevenir su desvío hacia canales ilícitos”, aclaran. El abanico de responsabilidades es amplio, ya que a su vez tiene a cargo el seguimiento de las investigaciones de delitos complejos y de criminalidad organizada transnacional, “con especial atención a actividades terroristas y/o su financiamiento, trata y tráfico ilícito de personas, tráfico de vehículos y autopartes, tráfico de armas, explosivos y material sensible, contrabando, tráfico de divisas, lavado de activos y venta de medicamentos adulterados”, entre otros.
A pesar de la gran cantidad de actividades bajo su mando, el programa, que en 2025 tiene un presupuesto vigente de $4.278 millones, dispondrá en 2026 de $4.276 millones: una leve reducción en términos nominales, pero mucho más amplia si se tomara en cuenta la inflación prevista (del 10,1%, según el Ejecutivo).
Finalmente, el Programa de Seguridad Federal, del que depende la actividad de “Prevención y Conjuración del Narcotráfico” será el único que crecerá: pasará los de $ 43.394 millones vigentes en 2025 a los $ 49.621 millones en 2026. Se ocupa de “la prevención e investigación de aquellas acciones que infrinjan las leyes penales y/o disposiciones administrativas que tipifican y regulan el uso de drogas peligrosas, estupefacientes en general y de psicofármacos, como así también de las operaciones financieras patrimoniales de delitos concomitantes”.
En total, entre los tres programas, el dinero destinado a la lucha, prevención e investigación contra el narcotráfico y el crimen organizado pasará de los $ 151.223 millones vigentes en 2025 a los $ 133.391 millones en 2026. Del total presupuestado para este año se ejecutó el 71%.
Baja el presupuesto en control de fronteras
Según se desprende de la planificación de ingresos y gastos para el ejercicio de 2026, el programa de Seguridad en Fronteras también bajará su presupuesto: de los $ 417.252 millones vigentes este año a los $ 414.165 millones para el próximo. El control de las fronteras estará orientado entre otras cosas, explica el documento, a “impulsar la seguridad integral contra el narcotráfico, el crimen organizado, la trata y los delitos complejos mediante un despliegue especializado”.
También enumera las responsabilidades de este programa: “el control y vigilancia de fronteras; la seguridad de los Pasos Internacionales y el apoyo como Fuerza Pública a los organismos de control del Estado; el control y registro del ingreso y egreso de personas por los Pasos
Internacionales cuya función migratoria le fue delegada a la Gendarmería Nacional Argentina por la Dirección Nacional de Migraciones, entre otros”. También está encargado del patrullaje de prevención y control en zonas de límite fronterizo.