Por Maximiliano Borches. El fantasma de la tercera Guerra Mudinal sobrevuela el planeta por estas horas, tras el certero ataque de la aviación estadounidense que destruyó las centrales nucleares iraníes de Fordow, Natanz e Isfahán, en una devastadora operación denominada “Operación Martillo de Medianoche”, en la la principal potencia global arrojó -entre otras- unas 14 bombas antibúnker de casi 14 mil kg (las más poderosas del mundo) que penetraron a más de 60 metros bajo tierra produciendo las explosiones más conmovedoras desde fines de la Segunda Guerra Mundial. Rusia y China aliados de Irán-, condenaron duramente el ataque, en tanto el Estado de los ayatolas dijo que se “cruzó una línea roja muy grande” y prometieron atacar objetivos estadounidenses e israelíes “con todas las fuerzas”, tras la incursión militar en su territorio, que en términos globales, hicieron del mundo un lugar más peligroso a partir de este domingo. El presidente ruso Vladimir Putin aseveró que la escalada del conflicto «tendría consecuencias imprevisibles para toda la situación en la región de Oriente Medio» y abogó por un acuerdo entre las partes beligerantes. “El Gobierno chino condena enérgicamente el ataque de EE.UU. contra Irán y contra instalaciones nucleares bajo supervisión del Organismo Internacional de Energía Atómica. Esta acción de EE.UU. viola gravemente los propósitos y principios de la Carta de la ONU y el derecho internacional y agrava las tensiones en Medio Oriente”, dijo por su parte, un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China en un comunicado.
Foto de portada: Destrucción de la central nuclear de Fordo. @Maxar.
El conflicto iniciado por Israel contra objetivos militares y de desarrollo nuclear del Estado teocrático de Irán tomó un impulso aún más dramático con la intervención directa de los Estados Unidos, que llevaron a cabo un devastador ataque con las bombas antibúnker más grandes del mundo (GBU-57, de casi 14 mil kgs aptas para perforar la tierra hasta 70 metros, destruyendo a todo tipo de bases construidas bajo tierra hasta el presente).
Si bien oficialmente el objetivo del ataque estadounidense, que refuerza a las operaciones israelíes, es dejar fuera de juego al plan nuclear iraní con fines militares, políticamente se busca derrumbar al régimen oscurantista de los ayatollas, hoy aliado de Rusia y China, para redefinir el mapa geopolítico global, y “recuperar” Irán para los intereses occidentales, en el marco de la pelea política e económica más profunda, que comenzó a desatarse entre China y los Estados Unidos para el control global del comercio y la definición de una nueva hegemonía mundial tras la caída del Muro de Berlín y su posterior (y actual) protagonismo del país ubicado al norte de América del norte como gendarme planetario.
A partir de ahora, solo resta esperar cual será la repuesta de Irán en el Medio Oriente (léase las bases militares de Estados Unidos e la región, y por supuesto Israel), y en el mundo, debido a su poderosa red de grupos terroristas como los Hutíes en Yémen, Hezbollah en el Líbano y Hams en Gaza (estos dos últimos se encuentran hoy muy debilitados militar y operativamente a consecuencia de las acciones militares israelíes).
No hay que olvidarse que en 1992 y 1994, la Argentina sufrió los primeros dos ataques del terrorismo internacional financiado por Irán, tras el apoyo del entonces presidente Carlos Menem a la primera Guerra del Golfo Pérsico. Hoy, el escenario de repite en gran medida, debido al apoyo que el actual presidente Javier Milei brinda al Estado de Israel y su realineamiento total a los intereses de los Estados Unidos.
El mundo hoy es un poco más peligroso que ayer y menos que mañana.
Síntesis:
- El presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció este sábado que la Fuerza Aérea del país norteamericano atacó tres instalaciones nucleares en el país persa. «Hemos completado nuestro exitoso ataque a tres sitios nucleares en Irán, incluyendo Fordo, Natanz e Isfahán. Todos los aviones están ahora fuera del espacio aéreo iraní. Una carga completa de bombas fue lanzada en el sitio principal, Fordo», detalló.
- Irán afirma que Estados Unidos «cruzó una línea roja muy grande» con sus ataques
- China rechaza «firmemente» los ataques de Estados Unidos contra instalaciones nucleares de Irán
- Comisión Europea advierte que «Irán nunca debe adquirir la bomba» nuclear
- Alemania insta a Irán a reanudar «inmediatamente» las negociaciones con Estados Unidos
- OIEA convoca una «reunión de emergencia» tras ataques de Estados Unidos a Irán
- UE insta a «todas las partes a dar un paso atrás» tras ataques de Estados Unidos en Irán
- En total, las fuerzas estadounidenses emplearon aproximadamente 75 armas guiadas de precisión. Esto incluyó 14 GBU-57 de 30.000 libras (14 mil kilos), lo que marca el primer uso operativo de esta arma. Además, más de 125 aeronaves estadounidenses participaron en esta misión, incluyendo bombarderos furtivos B-2.
- El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Seyed Abbas Araghchi, recordó que «de conformidad con la Carta de la ONU y sus disposiciones, Irán se reserva todas las opciones para defender su soberanía, intereses y pueblo».
¿Cómo se realizó la «Operación «Martillo de Medianoche»?
Los preparativos cobraron premura hace un par de semanas, ante el aumento de las tensiones entre Irán e Israel y el ataque israelí del día 13 contra objetivos nucleares y militares iraníes. Los planes eran “altamente confidenciales” y apenas un puñado de personas los conocían, según ha revelado Caine.
La búsqueda del secreto fue tal que incluso se utilizaron varias maniobras de despiste: horas antes del ataque, el sábado, un grupo de bombarderos B-2 se dirigieron hacia el Pacífico, visibles, como señuelo. Algo que puso de inmediato en alerta a los medios y a los expertos: esos aviones son los únicos que pueden transportar las pesadas bomas antibúnker gBU-57, de más de 13.000 kilos, necesarias para horadar a la profundidad donde se encontraban las instalaciones de Fordow, bajo las montañas al sur de Teherán.
Según los avances que se iban mostrando en las aplicaciones comerciales de seguimiento de vuelos en tiempo real, esos aviones parecían dirigirse a la base militar en la isla de Diego García, en el océano Índico, y tenían ante sí una larga ruta de horas y horas hasta llegar.

Pero mientras tanto, los B-2 que de verdad iban a intervenir en la operación pusieron rumbo a Irán en modo furtivo en la dirección contraria, hacia el este, mucho más rápida. Las primeras bombas GBU-57 cayeron sobre Fordow a las 18.40, hora de Washington (02.10 hora de Teherán, 00.40 hora peninsular española). Era la primera vez que esas bombas se utilizaban en combate. Mientras Trump, ostensiblemente, mantenía una reunión con su Consejo de Seguridad Nacional en la sala de crisis de la Casa Blanca.
El golpe se desarrolló en solitario, sin participación israelí, ha puntualizado Caine. El alto mando militar sí reconoció que los aviones estadounidenses se beneficiaron de los bombardeos que habían llevado a cabo las fuerzas de Israel en días previos: habían atacado y debilitado enormemente los sistemas defensivos iraníes, lo que facilitó que los aparatos estadounidenses pudieran actuar sin impedimentos.
Los bombardeos concluyeron menos de media hora después, a las 19.05, hora estadounidense. En total, siete B-2 perpetraron los ataques contra los objetivos iraníes. 14 bombas GBU-57 se arrojaron contra Fordow y Natanz. Los ataques con bombas antibúnker se vieron seguidos de lanzamientos de una treintena de misiles Tomahawk contra Isfahán, donde se encontraban los misiles balísticos de mayor alcance iraníes, “para mantener el elemento de sorpresa”, según Caine. En total, las fuerzas armadas estadounidenses utilizaron 125 aviones, incluidos los bombarderos, aviones de combate, aviones de reabastecimiento y de vigilancia, y se lanzaron 75 proyectiles, incluidas las bombas GBU-57.