En medio de una importante pérdida de credibilidad por los llamativos números de inflación y pobreza que publican desde que asumió Javier Milei, el INDEC ahora publicó un informe que da cuenta de que la tasa de informalidad laboral promedio es de 42%, pero llega al 62% entre los cuentapropistas; el problema está mencionado en el documento del FMI, que pide una reforma laboral.
Según un nuevo informe del Indec, la tasa de informalidad promedio es de 42%, pero llega al 62% entre los cuentapropistas; el problema está mencionado en el documento del FMI, que pide una reforma laboral
El cuestionado INDEC lanzó el nuevo dato de informalidad laboral que muestra que el 42% de las personas que trabajan, ya sea bajo relación de dependencia o por cuenta propia, está en la informalidad. O bien, según la definición dada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), “desarrolla sus actividades al margen de las normas que las regulan”. Si se observa el universo solo de los cuentapropistas, el índice trepa al 62,4%, mientras que entre los asalariados la tasa de los que no tienen aportes es de 36,1%.
Esos índices, elaborados por el instituto oficial de estadística y difundidos hoy por primera vez, surgen de los resultados de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) y corresponden al cuarto trimestre de 2024. Solo en los 31 centros urbanos incluidos en el relevamiento, eso implica que las personas con ocupaciones informales son 5,7 millones.
En su nuevo informe de informalidad laboral, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) reveló que la tasa de empleo alcanzó el 45,7% en el cuarto trimestre dentro de los 31 aglomerados urbanos. De ellos, el 42% de los trabajadores no posee derechos laborales, mientras que el 57,8% se encuentra bajo los parámetros de formalidad. Se trata de una leve suba respecto al mismo período del año pasado (41,4%).
Para tener una radiografía de como sería a nivel nacional, si se extrapolara a la población total esto implicaría que de 21.509.912 trabajadores, unos 9.034.163 se encontraría en condiciones de informalidad y los 12.475.749 restantes corresponderían a los formales.
En ese sentido, el investigador Luis Campos, especialista en temas laborales, destacó el informe del INDEC, aunque explicó a Ámbito que este índice de informalidad no tiene en cuenta un factor clave que es la población rural, ya que se realiza en base a la Encuesta Permanente de Hogares de la población urbana. «Para este tema el sector rural también es muy importante», debido al alto índice de informalidad que manejan en esas labores.
Así y todo, aseguró que «el hecho de poder ver la informalidad más allá de los asalariados ya es un montón».
De los datos más destacables, más allá de la tasa de informalidad por fuera de los asalariados, que asombra que alcance casi el 70% de los trabajadores por cuenta propia; se observa que el empleo joven también tiene una tasa de informalidad alarmante, así como los rubros de casas particulares y construcción entre la rama de actividades.
Dentro de los trabajadores informales se comprende a las «personas ocupadas, ya sean independientes o en relación de dependencia, que desarrolla sus actividades al margen de las normas que las regulan», aclara el informe.
Informalidad laboral: más del 60% de los cuentapropistas no posee descuentos
En el desagregado por forma de trabajo, se destaca que la tasa de informalidad alcanzó al 62,4% de los trabajadores cuentapropistas, mientras que es del 35,8% entre los asalariados (dato que se conocía) y del 19,7% entre los patrones.
En esa línea, el sociólogo Daniel Schteingart destacó que era «muy necesario» este informe, ya que «hasta entonces, solo la podíamos conocer para los asalariados, que era aproximadamente el 75% de los ocupados. Ahora podemos conocerla también para los no asalariados, que es de aproximadamente el 25% restante».
Entre las mujeres, la tasa de informalidad también es más alta: el 43,4% de las empleadas no posee descuentos salariales, mientras que entre los hombres el umbral cede al 40,9%.
El rango etario más golpeados es el de los jóvenes que hasta los 29 años tienen un índice de informalidad de 58,7%, mientras que entre adultos mayores de 65 y más años tienen un 49,5% de informalidad y en el rango de 30 a 64 cede al 36,5%.
«Si bien la informalidad entre los jóvenes no sorprende, no deja de ser uno de los datos más importantes», aseguró Campos.
Entre las ramas de actividad, el servicio doméstico es el que tiene mayor tasa de informalidad, alcanzando el 77% de los trabajadores, mientras que en la construcción llega al 76,6% de los empleados y en comercio al 51,9%. La industria tiene la menor cantidad de trabajadores no registrados con el 36,1%.
Además, se destaca dentro de este informe que la informalidad baja de acuerdo al nivel educativo del trabajador: entre los empleados con un nivel superior de estudios y universitario completo la ocupación informal se ubica en el 10,4%, mientras que para aquellos que solo tienen el secundario completo alcanza al 32,4%.
#DatoINDEC
La tasa de empleo informal en 31 aglomerados urbanos fue de 42% en el 4° trimestre de 2024 https://t.co/ydr58Yb8Wz pic.twitter.com/HVhEwuDOFQ— INDEC Argentina (@INDECArgentina) April 14, 2025